Las piletas en casa son tendencia

Por Matías Carretero

La continuidad de las medidas de aislamiento en el marco de la pandemia por el COVID19 y la posibilidad incierta de acceso a los centros turísticos durante la próxima temporada de verano hizo que se dispararan las consultas para la compra de piletas en Mendoza, como así también su venta. Uno de los casos de éxito es el de IPC Pools que nació en 1993 en Mendoza y fue pionera en la fabricación de piscinas de plástico reforzado con fibra de vidrio.

"Al principio de la pandemia teníamos dificultades para vender porque nadie podía salir. Pero luego, cuando se fue extendiendo, la gente empezó a considerar el hecho de que en el verano no iba a poder irse de vacaciones y comenzaron a pensar en invertir en piscinas", explicó Mariano Paz, gerente de Marketing de IPC Pools.

Desde la firma afirmaron que esto se debe en gran medida a la situación económica actual y al hecho de que los argentinos capitalizan sus ahorros a través del dólar o de una inversión en bienes durables. "Frente a este contexto, el valor de nuestros productos no aumentó siguiendo el ritmo del dólar, sino que, por el contrario, respaldó al ahorro. Por lo tanto, mucha gente optó por una piscina", destacó Fernando Cuoghi, director de Proyectos de la empresa.

A modo de ejemplo señalaron que un producto terminado, que cuente con todo el equipo, cuesta alrededor de $300.000. "Hay más económicos, dependiendo del equipo", agregaron. Por ejemplo, una piscina de 4,20 metros por 2,50 cuesta alrededor de $280.000, pero también hay productos superiores a los 10 metros y otros que tienen hasta hidromasaje. La oferta es amplia y se adapta a distintos gustos y necesidades.

"Pronto estaremos lanzando en Mendoza nuestra nueva línea Jump, una propuesta económica que se presenta como una alternativa accesible en este contexto", anticipa Fernando. Lo interesante de estos modelos es que mantienen la calidad y la garantía, pero al ser más reducidos en tamaño, ofrecen la conjunción perfecta para complejos habitacionales, dúplex y muchas de las viviendas que actualmente son habituales en la construcción de Mendoza.

Debido a este crecimiento, durante la pandemia, la empresa incorporó a más de 80 colaboradores. Además como complemento de la planta en Mendoza que abastece a una red de concesionarios distribuidos a lo largo y ancho del país, se proyecta la apertura de una fábrica en otra provincia, adelantaron a nuestro medio.

Hoy, la empresa es la más grande de Argentina en su rubro con certificación de procesos bajo un sistema ISO 9001. Cuenta con una fábrica modelo ubicada en el Parque Industrial Las Heras, Mendoza, y más de 60 concesionarios en todo el país. Distribuye sus productos a cada uno de ellos mediante su amplia y moderna flota de camiones especialmente adaptados para este tipo de cargas, garantizando su llegada en forma más rápida, segura y económica.

"Los valores que distinguen a la marca desde sus inicios son innovación, pasión y confianza, lo que le ha permitido a la empresa consolidarse y crecer. Acompañar en forma personal a cada cliente en su decisión, teniendo en cuenta sus gustos personales, espacios disponibles, número de integrantes del grupo familiar, diseño del jardín y posibilidades económicas ha sido la clave del éxito de IPC Pools en todo el país", afirma Mariano.

Es importante destacar que la compañía posee una moderna línea de producción, que utiliza tecnología de última generación y personal altamente capacitado que trabaja bajo estrictas normas de calidad. "Cada piscina se concibe como un producto único que nace a través del exclusivo departamento de Diseño, Investigación & Desarrollo a cargo de reconocidos profesionales, quienes trabajan con las últimas tendencias arquitectónicas mundiales", nos comenta Fernando.

Todas las marcas y líneas de piscinas están compuestas por modelos de vanguardia respaldados por el sello de calidad IPC, equipadas con la más variada gama de accesorios modernos e innovadores del mercado para brindar una experiencia única.

Tres hermanos promoviendo el desarrollo

"Corría el año 2000 y la crisis de Argentina no pudo con la energía emprendedora de los hermanos Cuoghi, quienes se enfrentaron al desafío de ingresar en el mercado de las piscinas plásticas, un rubro que por entonces tenía bajo nivel de desarrollo tanto en modelos y tamaños como en calidad, equipamiento y servicios", recuerda Mariano Paz, gerente de Marketing de IPC Pools.

Así nació IPC, con un objetivo claro: fabricar piscinas plásticas de calidad, con el mejor equipamiento y servicio. Javier encaró este proyecto desde la parte comercial, Fernando como técnico en producción y Silvana en el área administrativa y financiera.

Innovación, Pasión y Confianza (IPC) son la clave del éxito de una empresa que hoy se ha consolidado como líder en el rubro con tecnología de avanzada. Cuenta con un gran equipo de trabajo en la mayor planta industrial del país, trabajando bajo un sistema de certificación de Procesos ISO 9001.

IPC Pools posee actualmente tres marcas registradas de piscinas, orientadas a las distintas necesidades y tres líneas de accesorios exclusivos. Además de su red de concesionarios en Argentina, la empresa está expandiéndose a Chile y Uruguay.