Casa de Uco: viñedos, turismo y lujo
La familia Tonconogy, vinculada al desarrollo inmobiliario en Buenos Aires, es la responsable del proyecto en Mendoza que demandará una inversión total de entre U$S8 y U$S10 millones de aquí al 2013.
El proyecto puede dividirse en tres unidades de negocio combinadas: la producción de uvas para la elaboración dentro o fuera del proyecto de vinos de alta calidad, el inmobiliario con la venta de parcelas de 7.000 a 10.000 m2 cada una para la producción vitivinícola, sumado a la opción de venta de terrenos de 2.500 m2 para la construcción de viviendas, siempre que el interesado ya participe del proyecto, y una tercera parte que apunta al turismo y la gastronomía, explica Juan Tonconogy, director del proyecto.
La finca sobre la que se construye actualmente Casa de Uco ocupa 320 hectáreas al pie de la Cordillera de los Andes. Allí se cultivan viñedos a una altura de 1.200 metros sobre el nivel del mar y se construirá un lago artificial que le dará un carácter particularmente único al proyecto en Valle de Uco.
“En 2006 y 2007 surgió la idea de tener un viñedo con bodega y ofrecerlo para que otros inversores puedan compartir la tierra, los gastos y el proyecto. En 2008 encontramos un terreno ideal en la ruta 89 camino al Manzano Histórico y allí se compraron 320 hectáreas y se plantaron 70 hectáreas con uvas de alta calidad enológica para empezar a producir vinos premium”, cuenta Juan Tonconogy.
Casa de Uco es un proyecto integral que puede dividirse en tres áreas de negocios integradas y complementarias.
De las 320 hectáreas que tiene en total el proyecto, ya hay 70 hectáreas cultivadas con variedades como malbec (50 hectáreas), pinot noir, cabernet franc, chardonnay, petit verdot y suavignon blanc. Estos viñedos ya están en producción y esta es su primera vendimia de la que esperan obtener entre 50.000 a 100.000 botellas de vino. Son viñedos en vías de ser declarados orgánicos, señala Juan Tonconogy.
Junto con los viñedos, el proyecto prevé la construcción de una bodega de 300.000 litros de capacidad pero que puede llegar a ampliarse hasta el millón de litros y estará bajo el control y asesoramiento del enólogo italiano y winemaker internacional Alberto Antonini y su consultora Mattura. La bodega empezará a construirse en breve con el objetivo de que entre en producción en 2013 y será ecológica, ya que todos sus procesos se harán por gravedad se forma tal de no utilizar bombas ni sistemas mecánicos a la hora de elaborar los vinos.
Con las uvas del proyecto, la bodega elaborará vinos bajo la marca Casa de Uco, que se venderán a entre $80 y $300.
Los propietarios de una o varias de las parcelas que ya están a la venta tendrán acceso a la infraestructura social y recreativa del lugar y se convertirán instantáneamente en miembros del Wine Hotel & Spa, con ventajas y descuentos durante su estadía.
Inversión inmobiliaria
De las 320 hectáreas que tiene el proyecto, 70 ya están en producción intensiva con el objetivo de elaborar vinos de calidad. El resto del terreno ofrece dos alternativas de inversión: comprar parcelas de entre 7.000 y 10.000 m2 con vid para la elaboración de vinos o la venta de uvas, y la compra de terrenos de 2.500 m2 para la construcción de viviendas permanentes o de fin de semana.
Según el Director del proyecto, los que compran parcelas en Casa de Uco obtienen el título de propiedad y entran en un formato de administración común o compartida del proyecto. Al término de cada cosecha, el interesado puede vender la uva a terceros o darle la uva a la bodega del complejo para que elabore su vino. Con esto, cada inversor va a poder obtener una rentabilidad suficiente como para cubrir los gastos y sacar beneficios. Eso, si así lo quiere, ya que puede elegir elaborar su vino con el asesoramiento de Alberto Antonini y destinarlo a consumo personal, de sus amigos o bien venderlo con la marca que quiera.
El valor de compra de la hectárea incluye la implantación de las vides y el mantenimiento por los tres primeros años hasta que entran en producción. Fuera de esto, por el sólo hecho de participar del proyecto, cada dueño de una parcela va a recibir por año y por hectárea 150 botellas del vino Cada de Uco y va a obtener el derecho a usar el hotel por tres noches gratis al año y descuentos en hospedaje y gastronomía. Lo mismo que puede optar por no vender su uva y elaborar vino.
Fuera de la zona de viñedos, Cada de Uco ofrece un área total de 3,5 hectáreas para la venta de lotes de 2.500 m2 como mínimo para la construcción de casas de fin de semana. Eso sí, sólo podrán comprar un terreno aquellos inversores que ya tienen una parcela de viñedos. El tipo y estilo de la construcción va a estar regulado y el proyecto ofrece tres tipos posibles de construcción.
La tercera pata del proyecto es el turismo, por eso Casa de Uco contempla la construcción de un hotel con 25 habitaciones distribuidas entre un edificio central y 10 boungalows de 100 m2 cada uno ubicados entre los viñedos. Junto con el hotel, cuya construcción ya empezó y se espera terminar para la Vendimia 2013, el proyecto contempla levantar un restaurante para 100 cubiertos, un spa, un wine lounge, cancha de tenis y una piscina climatizada rodeada de una laguna con vista a la montaña.
El hotel incluye servicios y amenities de alto nivel como un spa, restaurante, wine lounge y un quincho. El spa cuenta con un sauna seco, un baño finlandés, en hamman, bañeras para tratamientos, zonas exteriores e interiores de relax y un gimnasio. Además ofrecerá tratamientos a base de vid e hidroterapia con técnicas que combinan las virtudes antioxidantes del agua subterránea extraída a 300 metros de profundidad.
El restaurante, por su parte, ofrecerá a todo público (huéspedes y visitantes) platos de cocina gourmet regional con una extensa carta de vinos de la zona. Y con esto, la oferta gastronómica se amplía con un wine lounge & cellar, que ofrecerá degustaciones en una sala de reuniones y una cava subterránea especialmente construida para tal fin, y un quincho especialmente construido para integrarse con la laguna, arroyos y los viñedos de Casa de Uco.
El proyecto puede dividirse en tres unidades de negocio combinadas: la producción de uvas para la elaboración dentro o fuera del proyecto de vinos de alta calidad, el inmobiliario con la venta de parcelas de 7.000 a 10.000 m2 cada una para la producción vitivinícola, sumado a la opción de venta de terrenos de 2.500 m2 para la construcción de viviendas, siempre que el interesado ya participe del proyecto, y una tercera parte que apunta al turismo y la gastronomía, explica Juan Tonconogy, director del proyecto.
La finca sobre la que se construye actualmente Casa de Uco ocupa 320 hectáreas al pie de la Cordillera de los Andes. Allí se cultivan viñedos a una altura de 1.200 metros sobre el nivel del mar y se construirá un lago artificial que le dará un carácter particularmente único al proyecto en Valle de Uco.
“En 2006 y 2007 surgió la idea de tener un viñedo con bodega y ofrecerlo para que otros inversores puedan compartir la tierra, los gastos y el proyecto. En 2008 encontramos un terreno ideal en la ruta 89 camino al Manzano Histórico y allí se compraron 320 hectáreas y se plantaron 70 hectáreas con uvas de alta calidad enológica para empezar a producir vinos premium”, cuenta Juan Tonconogy.
Casa de Uco es un proyecto integral que puede dividirse en tres áreas de negocios integradas y complementarias.
De las 320 hectáreas que tiene en total el proyecto, ya hay 70 hectáreas cultivadas con variedades como malbec (50 hectáreas), pinot noir, cabernet franc, chardonnay, petit verdot y suavignon blanc. Estos viñedos ya están en producción y esta es su primera vendimia de la que esperan obtener entre 50.000 a 100.000 botellas de vino. Son viñedos en vías de ser declarados orgánicos, señala Juan Tonconogy.
Junto con los viñedos, el proyecto prevé la construcción de una bodega de 300.000 litros de capacidad pero que puede llegar a ampliarse hasta el millón de litros y estará bajo el control y asesoramiento del enólogo italiano y winemaker internacional Alberto Antonini y su consultora Mattura. La bodega empezará a construirse en breve con el objetivo de que entre en producción en 2013 y será ecológica, ya que todos sus procesos se harán por gravedad se forma tal de no utilizar bombas ni sistemas mecánicos a la hora de elaborar los vinos.
Con las uvas del proyecto, la bodega elaborará vinos bajo la marca Casa de Uco, que se venderán a entre $80 y $300.
Los propietarios de una o varias de las parcelas que ya están a la venta tendrán acceso a la infraestructura social y recreativa del lugar y se convertirán instantáneamente en miembros del Wine Hotel & Spa, con ventajas y descuentos durante su estadía.
Inversión inmobiliaria
De las 320 hectáreas que tiene el proyecto, 70 ya están en producción intensiva con el objetivo de elaborar vinos de calidad. El resto del terreno ofrece dos alternativas de inversión: comprar parcelas de entre 7.000 y 10.000 m2 con vid para la elaboración de vinos o la venta de uvas, y la compra de terrenos de 2.500 m2 para la construcción de viviendas permanentes o de fin de semana.
Según el Director del proyecto, los que compran parcelas en Casa de Uco obtienen el título de propiedad y entran en un formato de administración común o compartida del proyecto. Al término de cada cosecha, el interesado puede vender la uva a terceros o darle la uva a la bodega del complejo para que elabore su vino. Con esto, cada inversor va a poder obtener una rentabilidad suficiente como para cubrir los gastos y sacar beneficios. Eso, si así lo quiere, ya que puede elegir elaborar su vino con el asesoramiento de Alberto Antonini y destinarlo a consumo personal, de sus amigos o bien venderlo con la marca que quiera.
El valor de compra de la hectárea incluye la implantación de las vides y el mantenimiento por los tres primeros años hasta que entran en producción. Fuera de esto, por el sólo hecho de participar del proyecto, cada dueño de una parcela va a recibir por año y por hectárea 150 botellas del vino Cada de Uco y va a obtener el derecho a usar el hotel por tres noches gratis al año y descuentos en hospedaje y gastronomía. Lo mismo que puede optar por no vender su uva y elaborar vino.
Fuera de la zona de viñedos, Cada de Uco ofrece un área total de 3,5 hectáreas para la venta de lotes de 2.500 m2 como mínimo para la construcción de casas de fin de semana. Eso sí, sólo podrán comprar un terreno aquellos inversores que ya tienen una parcela de viñedos. El tipo y estilo de la construcción va a estar regulado y el proyecto ofrece tres tipos posibles de construcción.
La tercera pata del proyecto es el turismo, por eso Casa de Uco contempla la construcción de un hotel con 25 habitaciones distribuidas entre un edificio central y 10 boungalows de 100 m2 cada uno ubicados entre los viñedos. Junto con el hotel, cuya construcción ya empezó y se espera terminar para la Vendimia 2013, el proyecto contempla levantar un restaurante para 100 cubiertos, un spa, un wine lounge, cancha de tenis y una piscina climatizada rodeada de una laguna con vista a la montaña.
El hotel incluye servicios y amenities de alto nivel como un spa, restaurante, wine lounge y un quincho. El spa cuenta con un sauna seco, un baño finlandés, en hamman, bañeras para tratamientos, zonas exteriores e interiores de relax y un gimnasio. Además ofrecerá tratamientos a base de vid e hidroterapia con técnicas que combinan las virtudes antioxidantes del agua subterránea extraída a 300 metros de profundidad.
El restaurante, por su parte, ofrecerá a todo público (huéspedes y visitantes) platos de cocina gourmet regional con una extensa carta de vinos de la zona. Y con esto, la oferta gastronómica se amplía con un wine lounge & cellar, que ofrecerá degustaciones en una sala de reuniones y una cava subterránea especialmente construida para tal fin, y un quincho especialmente construido para integrarse con la laguna, arroyos y los viñedos de Casa de Uco.
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