Poco entusiasmo con el Procrear

Los movimientos que genera el plan nacional de crédito parecen apuntar a la contención de la obra privada chica. Se esperan anuncios para desarrollos urbanísticos pero sin conformación.

Por Ezequiel Derhun

A esta altura de la crisis generada por la pandemia del Coronavirus, que agudizó el desplome de la actividad de la construcción, cualquier índice que se mueva levemente hacia arriba parece ser una buena noticia. Sin embargo, el balance es negativo y relanzamientos como el del programa Procrear no llegan a entusiasmar a los grandes desarrolladores de Mendoza. La buena, en este panorama, es la pequeña sonrisa que saca en los jugadores más chicos que mueven la rueda comercial de los materiales para construir.

El Procrear fue relanzado por la gestión de Alberto Fernández justamente para que esa rueda que estaba inmóvil empezara a generar cierta dinámica, aunque lenta, de avance. Con una línea de créditos más atomizada que en ediciones anteriores, las grandes oportunidades de inversión aún no tienen repercusión en la provincia, donde no hay proyectos a la vista para las líneas de desarrollo urbanístico, desarrollo habitacional y lotes con servicios.

Dividido en 9 líneas de créditos (4 de créditos personales y 5 de créditos hipotecarios), el programa nacional llegó con la novedad de una nueva fórmula para actualizar las cuotas, que es distinta a las UVA, que han generado un verdadero trastorno para las familias que vieron crecer el monto de las cuotas al ritmo de la inflación y a contramano de sus ingresos.

Recién en septiembre pasado se abrieron las inscripciones para las líneas más esperadas por las familias: Construcción y Ampliación, por lo que es demasiado pronto para evaluar sus efectos. Sí hay indicios sobre las líneas previas que ya están en estado de adjudicación, como son los Microcréditos para mejoras, los Mejoramientos/Gas y la línea de Mejoramiento/Refacción. Con estos créditos personales empezando a mover la rueda, la red de comercios minoristas empezó a notar el auge en las consultas, al igual que los profesionales de la construcción cuentapropistas, que vieron sus celulares y casillas de correos repletas de preguntas.

Gerardo Fernández, titular de la Cecim, evalúa que programas como el Procrear a nivel nacional o Mendoza Activa a nivel provincial van generando el efecto deseado, que es el de "contención" a la amplia red de comercios, profesionales y técnicos dedicados a "la obra chica". Sin embargo, como dijimos, la expectativa para grandes desarrollos no está. Y lo que es peor, se aguarda con poca expectativa lo que pueda suceder con las últimas líneas de crédito anunciadas.

Marcelo Bargazzi, quien preside la CAC en Mendoza, hizo su evaluación al respecto: "Desde la CAC no tenemos nuevos desarrollos. Proyectos grandes como los que se hicieron en la Sexta Sección de Ciudad o en Maipú no hay. Más que nada, la expectativa está en proyectos individuales. Primero van a salir con todas las líneas mas chicas. Al final, esperamos que salgan con alguna iniciativa de escala más grande. Pero hoy ya no tenes expectativa de nada. Cuando venga, veremos".

Expectativas en las comunas

Tras un sondeo por las comunas, particularmente las gobernadas por el PJ-Frente de Todos, no hay hasta el momento ninguna certeza de que en la provincia se vaya a anunciar algún desarrollo urbanístico de magnitud. Sobre todo, tenemos en cuenta que mega desarrollos como el de la Sexta Sección de Ciudad aún tienen una amplia disponibilidad.

"Eso sí, esperamos que lleguen", comentaron a Área Tres desde dos de esos departamentos, pero "firme y seguro no hay nada".

Hace poco, el subsecretario nacional de Política de Suelo y Urbanismo, Luciano Scatolini, aseguró a medios de locales que "están analizando los proyectos para el área metropolitana de Mendoza, pensando en el aporte del Gobierno nacional a territorios más equilibrados".

Así, sin confirmaciones, sólo se sabe que por ahora sólo se abrirán las inscripciones a viviendas ya terminadas, como las que se hicieron en Capital, Maipú, San Martín, Malargüe, La Paz y San Rafael.

Pérdida de empleo

Este año quedará marcado con un asterisco en los estudios estadísticos históricos con un desplome en abril pasado, en pleno aislamiento obligatorio, del 76% interanual en el sector de la construcción a nivel nacional. Al cerrar el primer semestre, el balance ofrecido por el Indec registró una merma "menos dramática", con una caída interanual del 37,8%. Pasada la primera mitad del año, la brecha sigue achicándose, aunque se mantiene en valores negativos.

Algo similar sucedió con los despachos de cemento, ya que según la Asociación de Fabricantes de Cemento Portland (AFCP) la baja en el primer semestre fue de 30,6%. En tanto, el desempeño a partir de junio viene en ascenso, ratificando la "lenta recuperación".

Estas cifran dan marco a por qué desde las cámaras empresarias sostienen que es "el peor año para la construcción". A nivel provincial, la cifra que viene dando vueltas es la de la pérdida de 10.000 empleos formales, de una masa total de 16.000, aclarando que un 65% trabaja en la informalidad.

Dos ayudas

-Precios Cuidados. En septiembre pasado, se lanzó a nivel país Precios Cuidados para tonificar la construcción. El programa comprende 93 productos que estarán disponibles en 500 bocas de expendio en todo el país, con rebajas promedio del 5%.

Para el presidente de la Cámara Argentina de la Construcción (Camarco), Iván Szczech, Precios Cuidados para el sector contribuirá particularmente con la recuperación de la actividad privada "que es el 70% del negocio".

-Nueva fórmula. Los nuevos Procrear llegan con la fórmula HogAr donde las cuotas se actualizarán cada mes en base a la evolución de salarios más inflación con un tope de 2%. La fórmula está basada en la evolución del Coeficiente de Variación Salarial (CVS) publicado por el Indec más el Coeficiente de Estabilización de Referencia (CER) publicado por el Banco Central, que refleja la evolución de la inflación, pero que no puede superar el 2%.

Más de Contenidos para exportar