Paradas de colectivo inteligentes para hacer frente al cambio climático

Una comuna española instalará paradas de colectivos equipadas con un novedoso sistema que permite bajar hasta 24 grados centígrados. Se trata de una alternativa para hacer frente a la ola de calor que atraviesa el sur del ibérico.

Un grupo de ingenieros de la Universidad de Sevilla desarrolló una innovadora solución para combatir el calor en Andalucía una parada de colectivos inteligente que mantiene temperaturas agradables de 22 o 24 grados, cuando en el el exterior podría superar los 40 grados. La clave de esta innovadora estructura son sus depósitos de agua que refrescan el ambiente dentro de la parada. El primer prototipo se instalará en Sevilla y comenzará a funcionar en 2024.

El sistema de acondicionamiento térmico detecta automáticamente la presencia de usuarios esperando y activa su enfriamiento, proporcionando una temperatura agradable para los pasajeros. 

¿Cómo lo logran? 

Un depósito subterráneo almacena el agua, que es enfriada por placas solares durante la noche y distribuida por la estructura de la parada cuando se detecta la presencia de personas. La duración del enfriamiento, que utiliza energía solar, es de 10 a 20 minutos, el tiempo máximo que los usuarios suelen esperar un autobús (en España).

Estas paradas de colectivos inteligentes también son autosuficientes, generando su propia electricidad y agua fría. Además, son capaces de tomar decisiones autónomas, deteniendo su funcionamiento en caso de que las temperaturas disminuyan. 

El diseño exterior se integra perfectamente con las paradas tradicionales, mientras que las funcionalidades inteligentes ofrecen un refugio climático durante las horas más calurosas del verano, de 13:00 a 19:00 horas, proporcionando una sensación térmica interior de aproximadamente 23 grados cuando las temperaturas exteriores alcanzan los 42 grados.

El proyecto, desarrollado durante siete años, verá la luz el próximo año con la instalación de la primera parada en la Avenida de la Cruz Roja en Sevilla. La innovadora solución ha llamado la atención de numerosos ayuntamientos en España e incluso Arabia Saudita ha mostrado interés en implementar este sistema. 

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