Con nueva planta, Friolatina impulsa su transformación

La empresa termina los últimos detalles de la flamante sede en Rodríguez Peña y pregona empuje y sustentabilidad. Además, implementa una novedosa escuela de montajistas.


Por Ezequiel Derhun


El crecimiento del Grupo LTN, paraguas de las empresas Friolatina, Acerolatina y Bervill, coronó a fines de mayo un importante hito dentro de su historia como industriales mendocinos al inaugurar su nueva planta con una línea continua para la fabricación de paneles de chapas para diferentes fines.


La nueva sede sobre el carril Rodríguez Peña emerge como una muestra de todo el potencial que tienen las nuevas tecnologías en construcción, haciendo gala de lo efectivo que puede ser la construcción con paneles moldeados, convirtiéndose en su propia y mejor vidriera.


En diálogo con Gustavo Bernardi, a cargo del grupo LTN junto a su padre Juan y su hermano Ariel, Área Tres hizo un repaso de la historia de la empresa, sus logros y su proyección hacia el futuro.


Socios del frío

“El ADN viene del frío”, dice Gustavo al recordar los inicios de su padre, 40 años atrás, fabricando equipos para heladeras familiares y comerciales. Aquella primera empresa se llamaba Friober y luego, con la proyección ya en mente, se divide y nace Friolatina, que fabrica cámaras frigoríficas, y Berville, que arma los equipos para estas cámaras.


“Se hacen desde cámaras pequeñas hasta grandes frigoríficos como el de Grido, dentro y fuera del país. Hemos exportado a más de 20 países como Afganistán, Angola, Nigeria, Estados Unidos, Brasil y Chile”, remarca Bernardi para dar cuenta del salto que experimentaron en la actualidad a partir de innovación y productos con valor agregado.


En ese salto de calidad hay varios momentos importantes para destacar. Uno de estos momentos se ubica alrededor de 2004, “cuando empezamos a importar desde Chile, donde se había instalado una fábrica de paneles. Empezamos a importar y coincidió un poco con el boom y la explosión de bodegas en Mendoza, que empezaron a requerir paneles, ya que priorizaban el valor del tiempo, que es lo que te da una construcción en seco, con el valor agregado de la aislación”.


Desde ese entonces, comenzaron a ver que, como solo tenían maquinas de líneas discontinuas en la provincia, estaba la posibilidad de encarar el mercado con su propia línea continua de paneles. Por eso, “como buenos industriales”, trajeron de China una máquina nueva de poliestireno expandido (EPS) que los proyectó en grande desde 2006.


Luego, “como el mercado iba respondiendo”, tomaron una decisión importante cuando en 2012 crearon Acerolatina, una empresa enfocada en crear herramientas constructivas eficientes, a nivel industrial y residencial.


Aislar es ahorrar

 “Si bien hay conciencia de que aislar es ahorrar, en años de alta inflación el tiempo sigue siendo el bien más preciado para cualquier cosa no sólo para la construcción”, dice Bernardi, aclarando que hoy se puede entregar una casa en tres meses o en seis meses aislada. De todas maneras, la sustentabilidad y el ahorro energético es un camino de ida, donde el Grupo LTN hace su aporte.


“Todo esto nace copiando lo que está pasando en Europa o en países desarrollados, en España o en Italia, que tienen patrones culturales similares a los nuestros. Allá, hacer un edificio aislado tiene un beneficio del 15% en impuestos. Creo que acá sin lugar a dudas se va a llegar a eso”, comenta y amplía que en el caso de Friolatina la nueva planta cuenta con un 8% de energía renovable y, con el correr de los años, ese porcentaje irá creciendo. “Sin lugar a dudas se va a terminar legislando, la apuesta no es solo para las empresas, sino para cuidar el planeta”.


Para ejemplificar, Bernardi explica que aislar te permite al momento de instalar un equipo de refrigeración la posibilidad de poner un equipo de 1500 frigorías en vez de uno de 3000 porque realmente te alcanza”.


“En el caso de nuestros techos, tienen una gran ventaja, ya que al estar industrializados, los costos han bajado, son livianos, tienen aislación, tienen resistencia y tenemos distintos tipos: minimalistas, imitación teja, muchas variedades”, destaca y agrega que los clientes llegan sabiendo que el 40% de la energía entra por el techo, pero de todas maneras aclara: “Si bien hay un cambio cultural, falta muchísimo”.


Movilizar el espíritu

“Ser empresario en Argentina no es simple, el empresario tiene espíritu, no importa si es grande o es chico, pero por ahí ve más con el corazón que con la razón”, lanza Bernardi, con su experiencia a cuestas y su trayectoria avalando sus afirmaciones.


El empresario remarca que el Grupo LTN nació como empresa familiar, que todas las etapas han sido difíciles, que siempre fue el “espíritu de hacer” lo que los impulsó hacia adelante.


“El industrial es más de hacer que de especular, esa es la realidad. En ese hacer hay muchas grandes historias en la provincia. El legado es soñar, pero no quedarse con el sueño, sino ir detrás del sueño, más allá de las dificultades, nosotros terminamos exportando a Afganistán, a Nigeria”.


Por último, Bernardi destaca que lo que los mueve es que trabajan bajo un concepto que tiene futuro, que tiene proyección para ir hacia una construcción moderna, renovada y sustentable.


Ampliación

La nueva planta de la empresa impresiona, con un claro mensaje visual de “mostramos lo que hacemos” o, aun mejor, “somos nuestra propia vidriera”. Así, la nave inaugurada en mayo alcanza los 5.200 m² cubiertos en un predio de una hectárea ubicada en pleno corazón industrial como es el carril Rodríguez Peña, construida con paneles aislantes, tanto de muro como de techo.


La nueva planta industrial, que contó con el beneficio del Bono Fiscal 1 para la inversión de 61 millones de pesos, pone en marcha una línea continua para la producción de paneles aislantes y tendrá una capacidad de producción superior al millón de m2 anuales. Esta tarea generará 50 nuevos puestos de trabajo.


Hoy, con una cartera cercana a los 5.000 clientes y con 10 países en la lista de destinos para la exportación, el Grupo LTN ratifica su presente promisorio con la nueva planta, que además contará con un auditorio para charlas y capacitaciones.



Escuela del montajista


En abril comenzó a funcionar bajo la administración de la empresa Grupo LTN la denominada “escuela del montajista”, para la que ya hay 30 inscriptos.



“Buscamos hacer docencia, implementar una mano de obra nueva, calificada. No hace falta ser profesional, pero sí tener conocimiento de herramientas. No sirve fabricar paneles si no hay quién los coloque”, resume Gustavo Bernardi.



Grupo en expansión


El Grupo LTN está formado por las siguientes empresas:



-Friolatina: empresa proveedora de soluciones integrales en cámaras frigoríficas modulares, cerramientos.


-Acerolatina: empresa dedicada a la fabricación y comercialización de paneles y soluciones arquitectónicas con aislamiento térmico y acústico.


-Bervill: fabricación de equipos de refrigeración, desde equipo de pequeña y mediana potencia, hasta uso industrial.