Construcción sin contaminación: cuáles son los materiales de futuro

Ecoladrillos, vidrios inteligentes y hormigón autorreparable son parte de la lista de soluciones sustentables en el sector.

A lo largo de años de toma de conciencia global sobre la importancia de cuidar el ambiente, la arquitectura y el mundo de la construcción se suman a una transformación sin precedentes para crear soluciones amigables y acorde con ese objetivo.

La sociedad, cada vez más en sintonía con las prácticas responsables, exige que todos los sectores productivos, económicos y educativos se tomen en serio un tema principal en los tópicos globales, en las mesas decisoras y en las tareas cotidianas de una familia, una empresa o una escuela.

En ese contexto, y como hemos repasado en otras ocasiones desde la Revista Área Tres, los materiales que combinan tecnología, eficiencia y sustentabilidad ganan terreno ante los tradicionales.

De hecho, los ladrillos de plástico o ecoladrillos, los aislantes naturales, la madera laminada cruzada, los vidrios inteligentes y el hormigón autorreparable son algunas de las opciones más elegidas para reducir el impacto ambiental, pero sin perder calidad.

La importancia de meditar acerca de los materiales

Según datos oficiales, el sector de la construcción es responsable de cerca del 40% de emisiones de CO2 en el mundo. Un dato que dispara las alarmas y genera la necesidad de buscar alternativas ecológicas ante los tradicionales recursos del cemento y el acero.

Entonces, repensar los materiales y apostar a una arquitectura sostenible es una prioridad. Además de hacerlo sin comprometer el diseño ni la durabilidad de las estructuras.

La apuesta de construir y cuidar a las generaciones futuras

En un contexto de crecimiento urbano constante, pero, a la vez, una urgente necesidad de cuidar los recursos, de pensar en el presente y en las generaciones que vienen y en apostar a mejorar la calidad de vida, la construcción sustentable no es sólo una cuestión de vanguardia.

Ante la crisis climática y, siendo testigos de un momento donde la contaminación es evidente, los materiales sustentables se transforman en aliados en la búsqueda de nuevas maneras de habitar el suelo, los ríos, montañas y mares.

Los materiales que encabezan el cambio

  • Ladrillos de plástico reciclado o ecoladrillos

  • Elaborados a partir de residuos plásticos u orgánicos, estos ladrillos ecológicos son la opción para reutilizar toneladas de basura y convertirlas en casas de bajo costo. En Mendoza, el sector público también es parte de la cruzada.

    Ya es un hecho el primer jardín maternal de la provincia en el barrio Sol y Sierra de Godoy Cruz. Se trata de una construcción realizada con material PET reciclado.

    Asimismo, se pueden ver en paradas de colectivo y bancos de espacios verdes, entre otros mobiliarios urbanos, estructuras realizadas en base a este material, donde intervienen, en conjunto con el Estado, empresas como Madera Plástica Mendoza, que ofrece soluciones sostenibles para diferentes áreas.

    2. Hormigón autorreparable

    Se trata de un tipo de concreto que tiene la aptitud de sellar sus grietas, lo que permite que tenga más durabilidad y, por lo tanto, menor necesidad de mantenimiento. Usa bacterias encapsuladas que, en contacto con la humedad, se activan y así cierra cualquier fisura.

    De esta manera, la vida útil se alarga y los costos de conservación se hacen notablemente menores.

    3. Vidrios o cristales inteligentes

    A través de la electricidad o tecnología digital, estos vidrios regulan la iluminación y el calor automáticamente, lo que optimiza la comodidad en el interior de los ambientes interiores y disminuyen el consumo. Más eficiencia energética y mejor cuidado del ambiente.

    4. Madera contralaminada o laminada cruzada

    Este elemento, gracias a su resistencia, huella de carbono positiva y ligereza, gana terreno en la construcción en altura. Tanto viviendas, escuelas como edificios públicos eligen esta alternativa en ciudades que tienen al urbanismo sostenible como bandera.

    También llamado CLT, esta madera gana terreno en estructuras comerciales y residenciales, es comparable por su resistencia al hormigón, pero su peso es mucho menor y se puede utilizar en paredes, cielorrasos, techos y pisos como una opción sostenible.

    5. Aerogeles como aislante natural

    A causa de su peso liviano y su estructura porosa, los aerogeles se convierten en aislantes naturales muy eficientes, ya sea para el sonido como para mantener la temperatura.

    Además, por sus características biodegradables, presentes en muchos de ellos; y su origen (provienen de materias primas renovables, como el corcho, la celulosa o el cáñamo), se agregan a la lista de elementos amigables con el planeta.

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