Con impronta cordobesa, la Casa Granero sorprende por su originalidad

Se trata de un proyecto que recrea espacios de uso agrícola y que fue pensada para adaptarse a las condiciones climáticas de la región.

Ubicada en Falda del Carmen, una localidad situada a 30 km de la Ciudad de Córdoba, se encuentra esta original casa desarollada por el estudio Sur taller de arquitectura bautizada con el nombre de Casa Granero

Como los girasoles, esta casa buscará el sol para lograr mayor eficiencia energética 

Se trata de un proyecto desarrollado en un área de 330 m² que, según su creadores, pretende ser una adaptación contemporánea de los espacios agrícolas para acopio y conservación de semillas. Toma la idea de espacio flexible y seguro frente a las inclemencias climáticas. De allí la lección de su nombre. 

En esa misma línea los responsables de Sur taller de arquitectura explican que la vivienda principal se emplaza entre un grupo de algarrobos, y deja espacio para una segunda etapa de la vivienda, huerta y patio. Dentro de la propiedad también se localiza un furgón térmico que se recicla para taller y casa de huéspedes.

Foto: Gonzalo Viramonte

La nave principal es el centro de la vida familiar "Pretende ser un espacio de encuentro y celebración donde los límites entre el interior y el exterior se diluyen bajo la gran cubierta" afirman los arquitectos.

Foto: Gonzalo Viramonte

Una de las principales características que distinguen a este proyecto que se adapta al clima local caracterizado la presencia de tormentas intensas. Por este motivo se planteó la ubicación de la cochera y los paramentos más cerrados en la orientación sur, dejando mínimas aberturas en posiciones estratégicas, para no perder vistas a los algarrobos y el firmamento. En la orientación Norte se ubicó la galería que conforma un filtro climático y de transición entre el exterior/interior.

Foto: Gonzalo Viramonte

Por último, desde Sur taller de arquitectura destacan que la materialidad se resuelve mediante un basamento monolítico de ladrillo común de 27 cm de espesor, en contraste con la cubierta liviana conformada por cabreadas de perfil metálico, que modulan la vivienda. 

Metal, aluminio y vidrio por un lado permiten en puntos estratégicos la conexión entre el exterior e interior. Los materiales utilizados en su acabado natural desprovistos de revoques y revestimientos. Todo lo planteado es genuinamente estructural.

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